quinta-feira, outubro 23, 2008


Aquí te amo.
En los oscuros pinos se desenreda el viento.
Fosforece la luna sobre las aguas errantes.
Andan días iguales persiguiéndose.

Se desciñe la niebla en danzantes figuras.
Una gaviota de plata se descuelga del ocaso.
A veces una vela. Altas, altas estrellas.

O la cruz negra de un barco.
Solo.
A veces amanezco, y hasta mi alma está húmeda.
Suena, resuena el mar lejano.
Este es un puerto. Aquí te amo.

Aquí te amo y en vano te oculta el horizonte.
Te estoy amando aún entre estas frías cosas.
A veces van mis besos en esos barcos graves,
que corren por el mar hacia donde no llegan.

Ya me veo olvidado como estas viejas anclas.
Son más tristes los muelles cuando atraca la tarde.
Se fatiga mi vida inútilmente hambrienta.
Amo lo que no tengo. Estás tú tan distante.

Mi hastío forcejea con los lentos crepúsculos.
Pero la noche llega y comienza a cantarme.
La luna hace girar su rodaje de sueño.

Me miran con tus ojos las estrellas más grandes.
Y como yo te amo, los pinos en el viento,
quieren cantar tu nombre con sus hojas de alambre.

Pablo Neruda, ...Aquí Te Amo... y Amanecer en O Grove, Foto de Ángel Durán

terça-feira, outubro 21, 2008

"Agregó que lo sucedido era una prueba más de lo mal que estaban las cosas en el país, donde sólo los privilegiados podían curarse con dignidad y los demás se debían conformar con yerbas de misericordia y cataplasmas de humillación."

Isabel Allende, Cuentos de Eva Luna, Barcelona, De Bolsillo, 1999, p.219.

quarta-feira, outubro 15, 2008


"Mañana. La palabra
iba suelta, vacante,
ingrávida, en el aire
tan sin alma y sin cuerpo,
tan sin color ni beso,
que la dejé pasar
por mi lado, en mi hoy.
Pero de pronto tú
dijiste:"Yo, mañana..."
Y todo se pobló
de carne y de banderas.
Se me precipitaban
encima las promesas
de seiscientos colores,
con vestidos de moda,
desnudas, pero todas,
cargadas de caricias.
En trenes o en gacelas
me llegaban - agudas,
sones de violines -
esperanzas delgadas
de bocas virginales
o veloces y grandes,
como buques, de lejos
como ballenas
desde mares distantes,
inmensas esperanzas
de un amor sin final
Mañana! Qué palabra
toda vibrante, tensa
de alma y carne rosada,
cuerda del arco donde
tú pusiste, agudísima,
arma de veinte años,
la flecha más segura
cuando dijiste: "Yo...".

Pedro Salinas, La Voz a Ti Debida y Amanecer - Dawn, Foto de Ángel Durán

domingo, outubro 12, 2008


Podrá nublarse el Sol eternamente;
podrá secarse en un instante el mar;
podrá romperse el eje de la Tierra
como un débil cristal.

¡Todo sucederá! Podrá la muerte
cubrirme con su fúnebre crespón;
pero jamás en mí podrá apagarse
la llama de tu amor.

Calima, Foto de Ángel Durán

quinta-feira, outubro 09, 2008


A cazar va el caballero,
a cazar como solía,
los perros lleva cansados,
el halcón pedrido había:
andando, se le hizo noche
en una oscura montiña.
Sentárase al pie de un roble,
más alto que allí había:
el troncón tenía de oro,
las ramas de plata fina;
levantando más los ojos,
vio cosa de maravilla:
en la más altita rama
viera estar una infantina;
cabellos de su cabeza
con peine de oro partía,
y del lado que los parte,
toda la rama cubrían;
la luz de sus claros ojos
todo el monte esclarecía.

quarta-feira, outubro 08, 2008


"El poeta John Keats (1795 - 1821) nos oferece una bella definición de poesía. Si queremos, podemos entenderla también como una definición de vida:

«La poesía debe sorprendernos por su delicado exceso, y no porque es diferente. Los versos deben tocar a nuestro hermano como si fuesen sus proprias palabras, como si estuviese recordando algo que, en la noche de los tiempos, ya conocía en su corazón.»

«La belleza de un poema no está en la capacidad que tiene de dejar al lector contento. La poesía es siempre una sorpresa, capaz de dejarnos sin respiración durante algunos instantes. Debe permanecer en nuestras vidas como la puesta del sol: algo milagroso y natural al mismo tiempo."


Paulo Coelho, Maktub y foto de Ángel Durán

terça-feira, outubro 07, 2008


LA VOZ A TI DEBIDA


Tú vives siempre en tus actos.
Con la punta de tus dedos
pulsas el mundo, le arrancas
auroras, triunfos, colores,
alegrías: es tu música.
La vida es lo que tú tocas.

De tus ojos, sólo de ellos,
sale la luz que te guía
los pasos. Andas
por lo que ves. Nada más.

Y si una duda te hace
señas a diez mil kilómetros,
lo dejas todo, te arrojas
sobre proas, sobre alas,
estás ya allí; con los besos,
con los dientes la desgarras:
ya no es duda.
Tú nunca puedes dudar.

Porque has vuelto los misterios
del revés. Y tus enigmas,
lo que nunca entenderás,
son esas cosas tan claras:
la arena donde te tiendes,
la marcha de tu reloj
y el tierno cuerpo rosado
que te encuentras en tu espejo
cada día al despertar,
y es el tuyo. Los prodigios
que están descifrados ya.

Y nunca te equivocaste,
más que una vez, una noche
que te encaprichó una sombra
-la única que te ha gustado-.
Una sombra parecía.
Y la quisiste abrazar.
Y era yo.

Pedro Salinas, La Voz a Ti Debida

segunda-feira, outubro 06, 2008


Los cielos son iguales.
Azules, grises, negros,
se repiten encima
del naranjo o la piedra:
nos cerca mirarlos.
Las estrellas suprimen,
de lejanas que son,
las distancias del mundo.
Si queremos juntarnos,
nunca mires delante;
todo lleno de abismos,
de fechas y de leguas.
Déjate bien flotar
sobre el mar o la hierba,
inmóvil cara al cielo.
Te sentirás hundir
despacio hacia lo alto,
en la vida del aire.
Y nos encontraremos
sobre las diferencias
invencibles, arenas,
rocas, años, ya solos,
nadadores celestes,
náufragos de los cielos.

Pedro Salinas, La Voz a Ti Debida y Roquetas de Mar, Foto de Ángel Durán

sábado, outubro 04, 2008


A duas flores


São duas flores unidas,
São duas rosas nascidas
Talvez no mesmo arrebol,
Vivendo no mesmo galho,
Da mesma gota de orvalho,
Do mesmo raio de sol.


Unidas, bem como as penas
Das duas asas pequenas
De um passarinho do céu...
Como um casal de rolinhas,
Como a tribo de andorinhas
Da tarde no frouxo véu.


Unidas, bem como os prantos,
Que em parelha descem tantos
Das profundezas do olhar...
Como o suspiro e o desgosto,
Como as covinhas do rosto,
Como as estrelas do mar.


Unidas... Ai quem pudera
Numa eterna primavera
Viver, qual vive esta flor.
Juntar as rosas da vida
Na rama verde e florida,
Na verde rama do amor!


Castro Alves, Espumas Flutuantes

sexta-feira, outubro 03, 2008


"Y en ese instante, como si lo supiera todo, ella le dijo que el miedo es más fuerte que el deseo, el amor, el odio, la culpa, la rabia, más fuerte que la leastad. El miedo es algo total, concluyó, con las lágrimas rodándole por el cuello. Todo se detuvo para el hombre, tocado en la herida más oculta. Presintió que ella no era sólo una muchacha dispuesta a hacer el amor por conmiseración, que ella conocía aquello que se encontraba agazapado más allá del silencio, de la completa soledad, más allá de la caja sellada donde él se había escondido del Coronel y de su propria traición, más alládel recuerdo de Ana Díaz y de los otros compañeros delatados, a quienes fueron trayendo uno a uno con los ojos vendados. Cómo puede saber ella todo eso?"


Isabel Allende, "Lo más olvidado del olvido", Cuentos de Eva Luna